¿Qué es?
La migraña vestibular (MV) es un diagnóstico. Dado que no existen signos o síntomas patognomónicos de esta enfermedad, el diagnóstico se basa en las guías o clasificaciones internacionales, como las elaboradas por el comité para la clasificación de las patología vestibulares de la Barany Society y por el subcomité para la clasificación de la migraña de la Sociedad Internacional de Cefalea.
1.- Migraña Vestibular definida
– Dolor de cabeza con al menos dos de las siguientes características: Localización unilateral, carácter pulsátil, dolor de intensidad moderada o severa, empeoramiento con la actividad física.
– Fotofobia y fonofobia
– Aura visual
2.- Migraña vestibular probable
Las pruebas vestibulares las reservamos para aquellos casos en los que el diagnóstico diferencial dentro de la vestibulopatía recurrente, especialmente en la enfermedad de Ménière, no está claro.
En general, los pacientes con MV no suelen presentar signos de disfunción auditiva o vestibular severa.
Tratamiento
El primer paso en el tratamiento de la MV ha de ser la adopción de determinadas medidas higiénico – dietéticas que afectan a la dieta y al sueño, en las que el primer paso debe ser la supresión de la ingesta de alimentos con cafeína ya que, en ocasiones, eliminar la cafeína puede ser suficiente para el control de la enfermedad
Existen distintos tratamientos médicos ( flunarizina, propanolol, topiramato, amitriptilina o acetazolamida). Cada opción terapéutica se mantiene al menos dos meses y se sustituye en caso de contraindicación por patología asociada o refractariedad al tratamiento propuesto.
Cuando existe refractariedad al tratamiento, o dudas en el diagnóstico, se suele colaborar con el servicio de Neurología en el manejo del paciente dada la índole neurológica de esta patología.